incatupac (El blogs de Claudio Cruces)

Me senté en el restaurante de la calle independencia, eran uruguayos. Rubén pidió "Cabrito", Arturo se tentó y dijo: yo también voy a comer cabrito". Lo mismo hizo Rafa. Pero cuando llegó el turno de Juan dijo: yo soy vegetariano, ¿qué podría comer? A lo que el mozo respondió: "tenemos cabrito vegetariano". Todos nos reímos pensando que era una broma, pero el mozo intervino: "en Uruguay, el cabrito es famoso por la forma de cocción. Tan importante es la forma de cocinarlo que el cabrito pasó a segundo plano y aquí, viendo que venía una cantidad importante de vegetarianos se nos ocurrió hacer cabrito vegetariano. La misma forma de cocinar, pero con vegetales... Juan comió cabrito vegetariano y todos nos quedamos pensando: la forma fue tan importante que superó al contenido. ¿será el cristianismo actual un cabrito vegetariano?

El restaurante era de esos caros. Yo me senté con el personaje y me daba calor preguntar. Menos mal que mi acompañante era más avisado y preguntó: ¿qué es el salmón a las finas hierbas? Entonces el mozo contestó: es una receta tan sencilla como exquisita, Es salmón ahumado al horno con 2 cucharadas de manteca 2 cebollitas de verdeo 1 cda de pan rallado 2 huevos duros picados Hojas de albahaca Perejil Pimienta y Sal. Yo me quedé pensando, si el mozo sabe tanto, ¿porqué no lo cocina él? Es que el mozo conoce las recetas para satisfacer la curiosidad de los comensales. Sabe la teoría, pero en la cocina, no sabría ni como empezar a trabajar. Así pasa con muchos teólogos. Son mozos, no cocineros. Conocen la teoría pero no llevan nada a la práctica. ¿Qué clase de teólogo te gustaría ser? ¿mozo o cocinero? ¿Sentarte en un escritorio o ensuciarte los pies en el barro de la historia?